Limpieza facial: Cómo realizarla, según el tipo de piel

Todas sabemos que la limpieza de la piel de la cara es una obligación pero no siempre conocemos las razones profundas, más allá de las meramente higiénicas. Así como nos bañamos y nos lavamos los dientes, limpiamos el cutis todos los días pero ¿sabemos hacerlo correctamente? ¿usamos los productos adecuados? Aquí respondemos a todas sus dudas.

“El desmaquillaje es un procedimiento que debe realizarse todos los días para quitar de la superficie del rostro todo tipo de producto como base de maquillaje, sombras, delineadores, alargador de pestañas, entre otros. La palabra lo dice: quitar el maquillaje. La limpieza diaria es un procedimiento similar, que también debe realizarse independientemente de que nos hayamos o no maquillado” diferencia Marcela Crivelli, cosmiatra.

El polvo, suciedad y demás polución del medio ambiente, más los residuos de las propias secreciones de la piel, deben ser eliminados de su superficie para que esta pueda respirar, depurarse y recibir sin problemas cualquier producto tratante que queramos usar a posteriori. Para este proceso se utiliza una crema o producto de limpieza, según la zona o el tipo de piel.

¿Crema, gel o barra limpiadora?

El producto a utilizar va a depender del biotipo cutáneo y la zona  que se quiera limpiar.

  • Si la piel es normal o seca, es ideal el uso de una emulsión de limpieza;
  • Si la piel es mixta podemos usar un gel de limpieza:
  • Si la piel es muy oleosa es ideal una crema jabonosa no alcalina, la cual se puede usar como jabón y quitar con agua, sin deteriorar la barrera de protección cutánea.

Tonificación: un paso que no debe faltar

La loción es el producto que siempre se debe usar después del de limpieza, su finalidad es devolverle a la piel su hidratación natural, restaurar el ph y aportar distintas cualidades según sea su tipo. Tenemos distintos tipos de lociones:

  • Astringentes: regulan la excesiva secreción sebácea;
  • Descongestivas: refrescan y calman enrojecimientos;
  • Tónicas humectantes que restablecen el equilibrio hídrico y el tono de la piel;
  • Aguas termales: ricas en vitaminas y oligoelementos, según su procedencia.

Exfoliación: para renovar la piel

Cuando nos referimos a la exfoliación, hablamos de la utilización de un producto, que por su formulación enriquecida con micro partículas (por ejemplo, carozo de durazno molido), permite hacer una limpieza por arrastre, mucho más profunda.  Generalmente su uso es de gabinete, aunque también puede realizarse en el hogar solo una vez a la semana, sin problemas.

La importancia de una limpieza profunda (subt)

La limpieza profunda en gabinete es el tratamiento profesional por excelencia, imprescindible y necesario para realizarse con periodicidad.

  • Su finalidad es realizar una limpieza mucho más importante que la diaria, quitar células córneas, afinar y vaciar de impurezas los folículos pilosos.
  • Ayuda a los procesos depurativos de la piel, y mejora la superficie para una mejor penetración de productos cosméticos correctivos, que el profesional recomendará y utilizará según cada problema a tratar o prevenir.  Es ideal la visita mensual a la cosmetóloga, no solo para realizarse limpiezas profundas, si no para complementar con otro tipo de tratamientos.
  • Los procesos exfoliativos pueden ser químicos, para los cuales se usan generalmente ácidos especiales. Son muy beneficiosos para la piel pero tienen que ser realizados por un profesional idóneo.  Los hay superficiales y medios, que son del ámbito cosmetológico o más profundos, que son del ámbito médico.
  • Tienen algunas contraindicaciones como la no exposición al sol, por lo que siempre es conveniente realizarlos en época invernal. El profesional debe elegir muy bien el tipo de ácido en función a la piel, y tener en cuenta su concentración.
  • Los ácidos más utilizados actualmente son los orgánicos, que además de ser exfoliativos (renuevan la piel), incentivan las capas más profundas para su mejor desarrollo y rejuvenecimiento.
  • En cambio, los procesos físicos, que se realizan con algún tipo de aparatología, como las puntas diamantadas, son más suaves y pueden realizarse todo el año, siempre de la mano de un profesional idóneo.
  • ·En gabinete es ideal la combinación de ambos métodos, según cada caso en particular.

Tratamientos medicos y cosmetológicos (subt)

Los mismos tratamientos de puntas de diamantes y exfoliaciones químicas pueden ser realizados tanto por el médico como por el profesional cosmetólogo, por supuesto que con variaciones.  Las ventajas de los tratamientos médicos es la rapidez y la profundidad, pero muchas veces se necesita de un período de reposo post tratamiento.  En cambio los cosmetológicos son muchos más suaves, pero no por eso menos efectivos y, generalmente, el paciente se puede reincorporar a sus actividades inmediatamente, además el profesional cosmetólogo complementa el peeling con la utilización de un tratamiento cosmético acorde a la necesidad del cliente.  Por supuesto que hay casos que solo tienen solución en el plano de la medicina, como algunas secuelas de acné, manchas muy profundas, y arrugas extremadamente marcadas.

La limpieza, tonificación, corrección y protección son los pasos básicos o el “ABC cosmetológico” que siempre debemos realizar tanto en gabinete como en el hogar.

Nutrición final

Finalmente, la crema hidratante o el tratamiento especial completa el ritual de cuidados faciales. A la mañana, la crema hidratante puede ser combinada con una base de maquillaje y/o un protector solar a partir de los primeros calores. A la noche, conviene usar una crema más rica, porque la piel está más preparada para absorber sus propiedades nutritivas.

Matenimiento diario

Estas sugerencias ayudan a lograr y mantener la piel limpia y radiante.

  • No tocar la cara con las manos ni dejar que la cubra el pelo.  Ambas acciones atraen suciedad al rostro.
  • Cambiar la funda de la almohada cada 3 o 4 días para minimizar la presencia de suciedad.
  • Limpiar el auricular del teléfono con regularidad para reducir la presencia de bacteria cerca del rostro.
  • Si utiliza maquillaje, mantener los cepillos y esponjitas limpios.

La opinión de la especialista

Doctora Adriana Raimondi, médica especialista en dermatología, miembro de la Sociedad de Dermatología y de la Academia Americana de Dermatología.

– La limpieza de la piel de la cara es un procedimiento que, por lo menos, debe hacerse dos veces al día: a la noche, para eliminar restos de maquillaje e impurezas ambientales; y a la mañana, para remover sudor y sebo acumulados durante las horas de descanso.

Sin duda, la limpieza antes de dormir es indispensable, ya que durante la noche, mientras descansamos, aumenta la circulación cutánea y es el mejor momento para aplicar tratamientos cosméticos que, si no se realizan sobre el cutis limpio, no cumplen su función y se dificulta su absorción.

Los productos pueden ser loción, crema o leche para pieles secas, y geles o espumas libres de aceites -en especial para las pieles grasas-, con un contenido de pH afín con la piel y en lo posible sin fragancia. No conviene usar jabones, que suelen ser alcalinos y tienden a deshidratar la piel.

-También conviene evitar limpiadores con colorantes, aceites minerales o alcohol. A veces, los llamados tónicos alcohólicos deshidratan e irritan la piel.

Para los párpados se necesitan desmaquillantes con pH neutro o compatible con el de las lágrimas. Preferentemente leches o ampollas sin perfume, especialmente elaboradas para contorno de ojos.

La excesiva limpieza o el uso de limpiadores no adecuados pueden generar deshidratación (sequedad excesiva), irritación, enrojecimiento y alteración de la flora bacteriana normal.

Nunca se debe usar agua caliente, solo agua fría o si se prefiere agua termal o de hierbas.

– Por exceso de limpieza, o por el uso de exfoliantes con demasiada frecuencia, la piel se deshidrata e irrita, se verá seca y con descamación. Evitar usar jabones germicidas, que lo único que consiguen es barrer las defensas naturales.

-La piel se renueva aproximadamente cada 25 días. Entonces, es conveniente realizar una limpieza de cutis profunda con extracción de espinillas u otras impurezas, con un professional una vez por mes. La piel quedará preparada para una buena hidratación y demás tratamientos.

Buena Salud