Shock de nutrición intensamente efectiva

Recuperá la salud de la piel dañada por el sol con una acción profunda que restaura los niveles óptimos de hidratación y nutrientes 

La exposición solar, más intensa durante el verano, sumada a las altas temperaturas contribuyen a la progresiva disminución de las cualidades bio-cosméticas de la piel: textura, luminosidad, tersura y flexibilidad. El agua de la piel se evapora, disminuyen  ácidos grasos, antioxidantes y vitaminas que provee nuestro organismo, y se genera la deshidratación de la piel. Los rayos UV deterioran con el paso de los años las funciones celulares, tales como la producción de colágeno, responsable de la elasticidad de la piel. Es por ello que son aconsejables los tratamientos de recuperación especialmente durante el verano y una vez que termina la temporada.

Las cremas “nutritivas” ayudan a preservar el contenido de agua de la piel en el estrato córneo, principal regulador del nivel de hidratación de la piel y por lo tanto de la flexibilidad cutánea, de la descamación y de la percepción de la piel, al controlar la salida e ingreso de sustancias humectantes. La disminución de estos elementos hace que esta barrera vaya perdiendo sus cualidades bio-cosméticas. Esto se produce como consecuencia del envejecimiento, los agentes externos (radiacion solar, viento, desecación ambiental y uso de jabones abrasivos, entre otros factores), las enfermedades dermatológicas (psoriasis, ictiosis) y las alteraciones genéticas (atopia).

Hasta la actualidad se conocieron como cremas “nutritivas” a aquellas que se aplicaban de noche, para ser dejadas sobre la piel varias horas. Anunciadas como “anti-aging” o “para piel seca”, se decía que, por estar provistas de vitaminas y sustancias “nutritivas”, dejaban la piel en mejores condiciones por la mañana. Por lo general, se trataba de productos espesos de textura grasosa que, a través de la oclusión o el sellado de los poros, disminuían la pérdida de agua y proporcionaban una superficie lisa, suave y tersa por la acción lubricante de sus integrantes de naturaleza oleosa.

Sin embargo, la piel no se “nutre” desde el punto de vista biológico desde el exterior, sino que lo hace a través de su metabolismo interno. El concepto de cremas “nutritivas” fue evolucionando con los años, como así también sus ingredientes.

Las nuevas cremas, correctamente llamadas “nutritivas” o emolientes, a través de sus renovados ingredientes, modifican las condiciones del estrato córneo.  Sus componentes, que actúan por los mecanismos de lubricación e hidratación, reparan, conservan y mejoran las condiciones bio-cosméticas de la barrera. Cuentan además con la ventaja de reemplazar las sustancias oleosas y pesadas por fluidos más eficientes y menos oclusivos. No dejan efecto de “crema grasa“ y proveen una sensación de agradabilidad cosmética, suave y ligera, gracias a la dispersión de los aceites naturales sobre la piel y a su actividad emoliente e hidratante. Entre sus componentes se destaca la presencia de productos naturales con cualidades cosméticas lubricantes y “nutritivas”, tales como glicerina, aceite de girasol, manteca de karité, aceite de Marula y el aceite de Buriti.

La última tecnología de RoC ofrece el bálsamo Hydra+ Nutrition, cuya intensa acción nutritiva restaura la barrera cutánea de las capas externas de la piel con un efecto anti-deshidratante, dejando suaves e hidratadas hasta las pieles muy secas durante las 24 hs. Su fórmula, enriquecida con manteca de karité, glicerina y aceites esenciales, ayuda a conservar el agua en la piel, y ademas provee vitaminas y minerales que penetran profundamente, retardando el envejecimiento y brindando frescura y flexibilidad. Contribuyen con estos beneficios el aceite de girasol y otras sustancias oleosas naturales provenientes de especies exóticas, el árbol de marula y la palma de moriche, responsables de la belleza de la mujer amazónica. Su textura de rápida absorción no deja restos grasos y es una excelente base para el maquillaje.

Precio sugerido al público: $ 143,30

 

Buena Salud