Encontrar una farmacia

Farmacia

Lo que en algunas ciudades es algo muy normal, en pequeñas poblaciones resulta en ocasiones una misión imposible, ya que debido al poco volumen de habitantes que tienen algunas de ellas no tienen un dispensario en el que conseguir sus medicamentos, y tienen que recurrir a una guia de farmacias en los alrededores para encontrar la más cercana. Este problema se acentúa aún más durante las noches y los fines de semana o los días de fiesta, ya que las farmacias de guardia se encuentran todavía más lejos. La solución podría ser una receta electrónica y un dispensador automático, como las máquinas de refrescos que se pueden instalar en las calles.

 Si la receta se grabara en la banda magnética de la tarjeta sanitaria, esta podría pasarse posteriormente por un lector instalado en la máquina expendedora, la cual llevaría un sistema capaz de medir la cantidad de pastillas que se deben administrar, sacando por un dispensador los medicamentos previo pago del precio correspondiente.

 Esta solución podría incluso facilitar la labor de los farmacéuticos, puesto que no sería necesario que las farmacias estuvieran abiertas para administrar los medicamentos, sino que en función del tamaño de la farmacia se podrían colocar una o varias de estas máquinas para mejorar el servicio y poder dar el merecido descanso a sus empleados.